El Barcelona y su nuevo escándalo por pagos millonario a un ex vicepresidente de la Comisión de Árbitros

La Fiscalía investiga un presunto delito de corrupción por pagar 1,5 millones de $us a una empresa del ex vicepresidente de la Comisión de Árbitros español

La Fiscalía investiga al Barça por pagos de hasta USD 1,5 millones al ex vicepresidente de la Comisión de Árbitros 

Un nuevo escándalo vuelve a sacudir al FC Barcelona por estas horas. La Fiscalía investiga por un presunto delito de corrupción entre particulares al club catalán y una empresa de José María Enríquez Negreira, ex árbitro y quien fuera vicepresidente del Comité Técnico de Árbitros de la Real Federación Española de Fútbol entre 1994 y 2018, por unos pagos de USD 1,5 millones realizados durante los últimos tres años de su mandato.

Según informó el programa ‘Qué t’hi jugues’ de la emisora Cadena SER Catalunya, el Barça pagó dicha cantidad de dinero a la empresa DASNIL 95 SL, donde Enríquez Negreira era el único socio, bajo el concepto de “asesoramiento técnico”. En concreto, la firma vinculada al colegiado le facturó a la entidad culé 532.728,02 euros en 2016; 541.752 euros en 2017, y 318.200 euros en 2018.

En el informe de la Agencia Tributaria se detalla que “el Barcelona quería asegurarse de que no se tomaban decisiones arbitrales en su contra, es decir, ‘que todo fuera neutral’”.

Después de conocerse la noticia, el FC Barcelona emitió un comunicado asegurado que contrató en el pasado los servicios como proveedor externo de DASNIL 95 SL para disponer de “informes técnicos” relacionados con el arbitraje profesional y con el objeto de “complementar información requerida por el cuerpo técnico del primer equipo y del filial”.

El Barcelona emitió un comunicado donde dio su versión sobre los pagos a la empresa del ex árbitro José María Enríquez Negreira 

El club catalán puso en su escrito que “contrató en el pasado” estos servicios, en el cual le suministraban en formato video “informes técnicos referidos a jugadores de categorías inferiores del Estado español para la secretaría técnica” de la institución azulgrana.

“Adicionalmente, la relación con el mismo proveedor externo se amplió con informes técnicos relacionados con el arbitraje profesional con el objeto de complementar información requerida por el cuerpo técnico del primer equipo y del filial, una práctica habitual en los clubes de fútbol profesionales”, asegura el comunicado.

Además, en este artículo difundido en su web y redes sociales oficiales, el Barça lamenta que “esta información aparezca justamente en el mejor momento deportivo de la presente temporada” y asegura que emprenderá “acciones legales contra quien malmeta la imagen del Club con posibles insinuaciones contrarias a la reputación de la entidad que se puedan producir a raíz de estas informaciones”.

En esa línea también fue el testimonio del presidente del club, Joan Laporta, quien explicó su versión de los hechos: “El asesoramiento arbitral lo tenemos en el organigrama del club. No es casualidad que salga ahora. Cualquier interpretación capciosa, tendenciosa y que insinúa cosas que no son, recibirá la respuesta proporcional del club. Nos reservamos cualquier acción para defender la honorabilidad y los intereses del club.”

Xavi Hernández, entrenador del cuadro culé, prefirió mantenerse al margen y pegarse a la comunicación oficial que hizo la institución. “Me intento centrar en el fútbol pero este club tiene estas cosas. Me han informado ahora. El club ya se ha pronunciado, en la línea del club”, comentó en la rueda de prensa previa al partido del Manchester United.

Enríquez Negreira fue árbitro de Primera División durante 13 temporadas, entre 1977 y 1992. Tras su retirada acabó presidiendo el Colegio Catalán de Árbitros, hasta que dos años después se convirtió en la mano derecha Victoria Sánchez Arminio, como vicepresidente del Comité Técnico de Árbitros.

El ex árbitro no ha podido aportar ninguna documentación por el trabajo realizado, ya que según aseguró a la Cadena SER, consistía en asesoramiento verbal de cómo debían comportarse los jugadores ante un árbitro, entre otras cuestiones. Ante la Fiscalía, el propio Enríquez Negreira negó que hubiera habido trato de favor al conjunto azulgrana por causa de esos pagos.